El tiffanie tiene la constitución del burmés, pero con un pelaje más largo. La cabeza forma una cuña corta y posee unas orejas de tamaño mediano a grande. La cola es larga y emplumada. Los ojos están bastante separados, su forma no es ni almendrada ni redondeada, y pueden presentar cualquier color del amarillo al verde. El cuerpo es firme y musculoso, con un lomo recto y fuerte.
Origen
El tiffanie es el único miembro de pelo semilargo del grupo asiático. Aparte del burmilla, que fue producto del cruce accidental entre un macho chinchilla y una hembra burmesa lila, los gatos del grupo asiático son obra de criadores que intentaban crear gatos de tipo burmés, pero en colores no reconocidos en esta raza. Durante el programa de cría de los asiáticos, algunas camadas presentaron gatitos de pelaje largo, que se usaron para crear esta atractiva raza.
País de Origen
Gran Bretaña
Personalidad
El tiffanie es amistoso y cariñoso. A esta raza le encanta que le presten atención y sentirse parte de la familia. Los tiffanie pueden ser bastante exigentes y, con frecuencia, siguen a sus amos por toda la casa demandando su atención. Los gatos del grupo asiático son muy inteligentes y suelen solucionar problemas como el de abrir las puertas. Se dice que muchas veces parecen comprender lo que se les dice y responder. Pueden ser muy sensibles a los sentimientos de sus dueños, lo que les convierte en excelentes compañeros.
Salud
No existen enfermedades específicas asociadas a los tiffanie en la literatura veterinaria. Como todos los gatos, necesitan vacunación para protegerse de las enfermedades, así como un control antiparasitario periódico y chequeos veterinarios anuales.
Nutrición
Cada gato es único y tiene sus particulares filias, fobias y necesidades en lo que a alimentación se refiere. No obstante, los gatos son carnívoros y cada gato debe obtener de su comida 41 nutrientes concretos diferentes. La proporción de estos nutrientes variará dependiendo de la edad, del estilo de vida y de la salud en general, por lo que cabe esperar que un enérgico gatito que todavía está creciendo necesite un equilibrio de nutrientes diferente al de un gato mayor menos activo.
Higiene
El pelaje semilargo del tiffanie requiere atención, pero no tanta como el pelaje largo y denso del persa. Un peine y un cepillo suave mantendrán su pelaje en buenas condiciones.
Fuente: www.purina.es